La Banda de Música “Maestro Ricardo Plácido Ojeda” del Servicio Penitenciario Provincial volvió a brillar y dio muestras – una vez más - de su enorme calidad y poder de convocatoria en la retreta navideña que brindó en la Plaza 9 de Julio de Posadas, en vísperas de noche buena y navidad.
La apertura del show y ante la sorpresa de todos comenzó con el cielo totalmente iluminado de colores producto de los fuegos de artificios lanzados por los organizadores del evento e inmediatamente después la Directora Administrativa de la Banda Alc. Insp. Liliana Compes, tomó el micrófono para agradecer la presencia del multitudinario público y aprovechó para realizar una reseña histórica de la Banda de Música del S.P.P. y lo que significaba –para todos ellos- ser protagonistas de una velada especial y compartir –a través de la música - con la comunidad posadeña las horas previas de noche buena y navidad.
El inicio musical se produjo con dos tradicionales temas navideños “Noche de Paz” y “Din, Din Don” , que fueron magistralmente cantados por la dulce voz de Maira Liz; mientras los “bajitos” sorprendidos asistían a la presencia de dos Papa Noel, quienes aparecieron con sus enormes bolsas rojas llenas de juguetes y golosinas para ellos y para transmitirles amor, alegría y los mejores deseos para el año que está a punto de iniciarse.
El “maestro” Ricardo Ojeda junto a los 40 integrantes de Banda, en tanto, hacían gala de todos sus conocimientos a través de la ejecución de temas clásicos y de ritmos característicos de otras latitudes que hicieron que los presentes –sobretodo el público adulto- se transporte mentalmente a épocas pasadas.
Pero además, varios artistas invitados - que gustosos se sumaron a la iniciativa – también tuvieron la posibilidad de demostrar su talento, tales los casos de los bailarines Alejandra Picos y Gustavo Nanio; además de los jóvenes cantantes Gabriela Faviero; Loreley y Lisandro Benítez quienes junto a Maira Liz hicieron “Que canten los niños” y la estelar presencia de la consagrada soprano Marina Moreno sin dejar de mencionar el color y ritmo contagioso que aportaron los percusionistas que integran la tradicional banda “Espiral”.
La nota de color de la noche fue aportada por todos los integrantes del Servicio Penitenciario Infantil quienes además de hacerse presentes aprovecharon para distribuir al público unos souvenires que hacían referencia a la insignia que los representa y que orgullosamente lucen en sus uniformes.
De este modo y a pesar de la amenaza de lluvia - anunciada por los pronosticadores del tiempo - el numeroso público presente, estimado en mil quinientas personas, pudo disfrutar gratuitamente y al aire libre de un espectáculo musical de relieve que pasó por ritmos regionales como el chotis, galopas, chamamé (con sapucai incluido) y también de otros –no menos contagiosos- como el samba brasilero, salsa, cumbia y Jazz. Ese dinamismo y permanente humor impuesto por los músicos y artistas, a lo largo del show, sumado a la “buena onda” de los presentes hicieron que la velada sea sumamente amena.
La apertura del show y ante la sorpresa de todos comenzó con el cielo totalmente iluminado de colores producto de los fuegos de artificios lanzados por los organizadores del evento e inmediatamente después la Directora Administrativa de la Banda Alc. Insp. Liliana Compes, tomó el micrófono para agradecer la presencia del multitudinario público y aprovechó para realizar una reseña histórica de la Banda de Música del S.P.P. y lo que significaba –para todos ellos- ser protagonistas de una velada especial y compartir –a través de la música - con la comunidad posadeña las horas previas de noche buena y navidad.
El inicio musical se produjo con dos tradicionales temas navideños “Noche de Paz” y “Din, Din Don” , que fueron magistralmente cantados por la dulce voz de Maira Liz; mientras los “bajitos” sorprendidos asistían a la presencia de dos Papa Noel, quienes aparecieron con sus enormes bolsas rojas llenas de juguetes y golosinas para ellos y para transmitirles amor, alegría y los mejores deseos para el año que está a punto de iniciarse.
El “maestro” Ricardo Ojeda junto a los 40 integrantes de Banda, en tanto, hacían gala de todos sus conocimientos a través de la ejecución de temas clásicos y de ritmos característicos de otras latitudes que hicieron que los presentes –sobretodo el público adulto- se transporte mentalmente a épocas pasadas.
Pero además, varios artistas invitados - que gustosos se sumaron a la iniciativa – también tuvieron la posibilidad de demostrar su talento, tales los casos de los bailarines Alejandra Picos y Gustavo Nanio; además de los jóvenes cantantes Gabriela Faviero; Loreley y Lisandro Benítez quienes junto a Maira Liz hicieron “Que canten los niños” y la estelar presencia de la consagrada soprano Marina Moreno sin dejar de mencionar el color y ritmo contagioso que aportaron los percusionistas que integran la tradicional banda “Espiral”.
La nota de color de la noche fue aportada por todos los integrantes del Servicio Penitenciario Infantil quienes además de hacerse presentes aprovecharon para distribuir al público unos souvenires que hacían referencia a la insignia que los representa y que orgullosamente lucen en sus uniformes.
De este modo y a pesar de la amenaza de lluvia - anunciada por los pronosticadores del tiempo - el numeroso público presente, estimado en mil quinientas personas, pudo disfrutar gratuitamente y al aire libre de un espectáculo musical de relieve que pasó por ritmos regionales como el chotis, galopas, chamamé (con sapucai incluido) y también de otros –no menos contagiosos- como el samba brasilero, salsa, cumbia y Jazz. Ese dinamismo y permanente humor impuesto por los músicos y artistas, a lo largo del show, sumado a la “buena onda” de los presentes hicieron que la velada sea sumamente amena.
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