Por Héctor Bárbaro *
CARTA ABIERTA SR. SECRETARIO DE COMERCIO INTERIOR DE LA NACIÓN
LIC. GUILLERMO MORENO
Ante la fijación del aumento máximo para la yerba mate en góndola del 7% para este año establecida por Ud. y el inicio de la zafra anual de hoja verde, quiero advertirle cual es la situación social y económica de la mayoría de las 17.000 familias productoras y de los 26.000 obreros rurales (tareferos) involucrados en el sector.
Cuando Ud. visitó a Misiones en setiembre del 2009, tuvimos una charla personal en la que creí que Ud. entendía la crisis de los productores yerbateros, la cual alimentó mi esperanza de hallar una solución. Pasado un año y medio, estamos peor que antes. El único aspecto que ha mejorado desde entonces, ha sido la creación de la Asignación Universal por Hijo, medida que no solo comparto sino que solicité oportunamente su ampliación a los pequeños productores incorporándolos al monotributo social.
Adicionalmente, la Asignación Universal benefició a los tareferos, otorgándoles un ingreso básico que fijó de hecho un valor mínimo por su trabajo. Esto, que es a las claras un avance en lo social, tiene como contracara una elevación abrupta de los costos laborales por parte del sector primario.
En paralelo, la situación de los tareferos, como públicamente trascendió para gran parte del país que desconoce la realidad misionera, es muchas veces angustiante en cuanto a las condiciones laborales, donde reina el hacinamiento, la insalubridad, la explotación de menores y la distribución de vales por mercaderías a consumir en el negocio del patrón, como en la época tristemente célebre de “mensúes” y “capangas”.
En su visita, dejó claro enfáticamente cómo serían los costos para el Estado si autoriza un aumento mayor al que en esa oportunidad estableció para la Yerba Mate. Su férrea negativa al incremento de la Yerba Mate no parece tener correlato en otros varios productos de la canasta básica con más incidencia en el índice de precios y mucho más esenciales para la alimentación de los argentinos, que han sufrido importantes aumentos desde entonces, con o sin su autorización, como así también el gasoil, los fertilizantes, y otros elementos necesarios para la producción. Es por eso, que el retraso relativo del valor de la Yerba Mate es indiscutible, y para nosotros, insostenible.
En pocas semanas comienza las reuniones en el Instituto Nacional de la Yerba Mate –INYM- para la fijación de los precios de la hoja verde y de la canchada, en donde los precios fijados por Ud. marcan de hecho un tope a los precios de cada eslabón de la cadena productiva, condenando a los más débiles (al productor minifundista y al tarefero) a la pobreza o al abandono de la chacra. Un mejor precio de la materia prima aceitaría todos los engranajes de una economía regional que dista de otras donde las rentas son extraordinarias. Misiones y la zona productora lo necesita imperiosamente para que nuestros tareferos puedan vivir con total dignidad, para que los colonos permanezcan en sus chacras y así evitar las migraciones a los cordones de pobreza de los centros urbanos y la concentración de la tierra en pocas manos, en las manos más poderosas.
Es por ello que le pido que revea el tope fijado por Ud. para los precios máximos de la Yerba Mate para este año que recién comienza, convencido que es un reclamo justo y que es consecuente con los objetivos de distribución de la riqueza que pregona el gobierno que Ud. integra y que yo como militante y como dirigente del sector agrario he apoyado desde sus comienzos.
Todo lo que he aportado a este gobierno ha sido sin recibir nada a cambio y por compartir un conjunto de valores y objetivos que no estoy dispuesto a olvidar y por los cuales debo ser consecuente. Apelo a este medio porque quiero que Ud., el resto de los integrantes del gobierno y la mayoría de lo misioneros, sepan que somos muchos los que no estamos dispuestos a rendirnos y a vernos condenados a la miseria.
Si estas líneas no son para Ud. un llamado de atención suficiente, le adelanto que marcharemos los tareferos y los productores llevando este reclamo a Buenos Aires para que nos oiga y entienda, que no pretendemos una renta extraordinaria, sino que simplemente queremos que nuestro trabajo nos permita vivir con la dignidad que nos merecemos todos.
A la espera de su respuesta, lo saludo muy atte.
Héctor “Cacho” Bárbaro
Diputado Provincial
Provincia de Misiones
Partido Agrario y Social.
CARTA ABIERTA SR. SECRETARIO DE COMERCIO INTERIOR DE LA NACIÓN
LIC. GUILLERMO MORENO
Ante la fijación del aumento máximo para la yerba mate en góndola del 7% para este año establecida por Ud. y el inicio de la zafra anual de hoja verde, quiero advertirle cual es la situación social y económica de la mayoría de las 17.000 familias productoras y de los 26.000 obreros rurales (tareferos) involucrados en el sector.
Cuando Ud. visitó a Misiones en setiembre del 2009, tuvimos una charla personal en la que creí que Ud. entendía la crisis de los productores yerbateros, la cual alimentó mi esperanza de hallar una solución. Pasado un año y medio, estamos peor que antes. El único aspecto que ha mejorado desde entonces, ha sido la creación de la Asignación Universal por Hijo, medida que no solo comparto sino que solicité oportunamente su ampliación a los pequeños productores incorporándolos al monotributo social.
Adicionalmente, la Asignación Universal benefició a los tareferos, otorgándoles un ingreso básico que fijó de hecho un valor mínimo por su trabajo. Esto, que es a las claras un avance en lo social, tiene como contracara una elevación abrupta de los costos laborales por parte del sector primario.
En paralelo, la situación de los tareferos, como públicamente trascendió para gran parte del país que desconoce la realidad misionera, es muchas veces angustiante en cuanto a las condiciones laborales, donde reina el hacinamiento, la insalubridad, la explotación de menores y la distribución de vales por mercaderías a consumir en el negocio del patrón, como en la época tristemente célebre de “mensúes” y “capangas”.
En su visita, dejó claro enfáticamente cómo serían los costos para el Estado si autoriza un aumento mayor al que en esa oportunidad estableció para la Yerba Mate. Su férrea negativa al incremento de la Yerba Mate no parece tener correlato en otros varios productos de la canasta básica con más incidencia en el índice de precios y mucho más esenciales para la alimentación de los argentinos, que han sufrido importantes aumentos desde entonces, con o sin su autorización, como así también el gasoil, los fertilizantes, y otros elementos necesarios para la producción. Es por eso, que el retraso relativo del valor de la Yerba Mate es indiscutible, y para nosotros, insostenible.
En pocas semanas comienza las reuniones en el Instituto Nacional de la Yerba Mate –INYM- para la fijación de los precios de la hoja verde y de la canchada, en donde los precios fijados por Ud. marcan de hecho un tope a los precios de cada eslabón de la cadena productiva, condenando a los más débiles (al productor minifundista y al tarefero) a la pobreza o al abandono de la chacra. Un mejor precio de la materia prima aceitaría todos los engranajes de una economía regional que dista de otras donde las rentas son extraordinarias. Misiones y la zona productora lo necesita imperiosamente para que nuestros tareferos puedan vivir con total dignidad, para que los colonos permanezcan en sus chacras y así evitar las migraciones a los cordones de pobreza de los centros urbanos y la concentración de la tierra en pocas manos, en las manos más poderosas.
Es por ello que le pido que revea el tope fijado por Ud. para los precios máximos de la Yerba Mate para este año que recién comienza, convencido que es un reclamo justo y que es consecuente con los objetivos de distribución de la riqueza que pregona el gobierno que Ud. integra y que yo como militante y como dirigente del sector agrario he apoyado desde sus comienzos.
Todo lo que he aportado a este gobierno ha sido sin recibir nada a cambio y por compartir un conjunto de valores y objetivos que no estoy dispuesto a olvidar y por los cuales debo ser consecuente. Apelo a este medio porque quiero que Ud., el resto de los integrantes del gobierno y la mayoría de lo misioneros, sepan que somos muchos los que no estamos dispuestos a rendirnos y a vernos condenados a la miseria.
Si estas líneas no son para Ud. un llamado de atención suficiente, le adelanto que marcharemos los tareferos y los productores llevando este reclamo a Buenos Aires para que nos oiga y entienda, que no pretendemos una renta extraordinaria, sino que simplemente queremos que nuestro trabajo nos permita vivir con la dignidad que nos merecemos todos.
A la espera de su respuesta, lo saludo muy atte.
Héctor “Cacho” Bárbaro
Diputado Provincial
Provincia de Misiones
Partido Agrario y Social.
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