Por Jorge Alejandro Varela
A pocos días del inicio del ciclo lectivo, es necesario señalar la forma en que la Provincia de Misiones considera y valora a los trabajadores de la educación. Una simple comparación entre las realidades de un Estado rico, como la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; y una Provincia pobre, como Misiones, muestra evidentes diferencias, que resulta oportuno indicar.
Si bien ambas jurisdicciones garantizan el piso de 1.740 pesos, no es lo mismo un salario de 1.740 pesos en Capital Federal que en Misiones. Los costos del transporte, de los alquileres, de las expensas, en Buenos Aires, son superiores a los que se pagan en Misiones. En muchos casos, un docente capitalino debe usar dos medios de transporte para concurrir a trabajar. El costo de vida, en términos reales, es mayor en Buenos Aires.
Además, el Gobierno porteño ofrece a sus docentes un aumento al básico del diez por ciento, pagadero en cuatro cuotas a lo largo del año. Misiones, a partir de febrero, paga íntegro un diez por ciento de aumento al básico.; y luego aportará 50 pesos más, a lo largo del año.
La Ciudad de Buenos Aires ofrece pagar sus docentes 17 pesos para el inicio del ciclo lectivo; y Misiones garantizó el pago de 70 pesos a los trabajadores de la educación.
La realidad es que, desde hace siete años, en Misiones comienzan las clases normalmente; y en otras jurisdicciones se pasan en negociaciones, y los alumnos no pueden recuperar el tiempo perdido de clases.
Una Provincia pobre garantiza aumentos efectivos. Otras provincias más ricas aún no han ofrecido aumentos. Eso marca, claramente, la valoración que hace el Gobierno de Misiones de la educación como un derecho humano y una herramienta positiva de transformación social.
Jorge Alejandro Varela
Subsecretario de Prensa
Provincia de Misiones
A pocos días del inicio del ciclo lectivo, es necesario señalar la forma en que la Provincia de Misiones considera y valora a los trabajadores de la educación. Una simple comparación entre las realidades de un Estado rico, como la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; y una Provincia pobre, como Misiones, muestra evidentes diferencias, que resulta oportuno indicar.
Si bien ambas jurisdicciones garantizan el piso de 1.740 pesos, no es lo mismo un salario de 1.740 pesos en Capital Federal que en Misiones. Los costos del transporte, de los alquileres, de las expensas, en Buenos Aires, son superiores a los que se pagan en Misiones. En muchos casos, un docente capitalino debe usar dos medios de transporte para concurrir a trabajar. El costo de vida, en términos reales, es mayor en Buenos Aires.
Además, el Gobierno porteño ofrece a sus docentes un aumento al básico del diez por ciento, pagadero en cuatro cuotas a lo largo del año. Misiones, a partir de febrero, paga íntegro un diez por ciento de aumento al básico.; y luego aportará 50 pesos más, a lo largo del año.
La Ciudad de Buenos Aires ofrece pagar sus docentes 17 pesos para el inicio del ciclo lectivo; y Misiones garantizó el pago de 70 pesos a los trabajadores de la educación.
La realidad es que, desde hace siete años, en Misiones comienzan las clases normalmente; y en otras jurisdicciones se pasan en negociaciones, y los alumnos no pueden recuperar el tiempo perdido de clases.
Una Provincia pobre garantiza aumentos efectivos. Otras provincias más ricas aún no han ofrecido aumentos. Eso marca, claramente, la valoración que hace el Gobierno de Misiones de la educación como un derecho humano y una herramienta positiva de transformación social.
Jorge Alejandro Varela
Subsecretario de Prensa
Provincia de Misiones
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